Estrechos del río Sus + Cascada del Cubo. Cuencas Mineras.

Caminos equipados en las Cuencas Mineras de Teruel.

En esta reseña detallaremos dos rutas diferentes situadas muy cerca de la población turolense de Josa. Estamos en la comarca de las Cuencas Mineras, una tierra dura, áspera y seca, con algunos rincones muy interesantes, especialmente a nivel geológico, pero también con bastas zonas de estepa muy monótonas.

En esta ocasión visitamos dos lugares: los Estrechos del río Sus o río de la Cantalera y la Cascada del Cubo. Los Estrechos del río Sus se encuentran a escasos 4 kilómetros de Josa y llegaremos hasta ellos caminando por el sendero balizado PR-TE 102. La Cascada del Cubo está también a unos 4 kilómetros de Josa, pero en esta ocasión cogeremos el coche para acercarnos y aparcaremos a poco más de 1 kilómetro de la misma, en un margen de la carretera que une Josa con Alcaine.

Las rutas son muy diferentes, pero están muy cerca y nos pueden servir para vivir un emocionante día de montaña por la zona. Ambas rutas cuentan con tramos equipados que no son adecuados para todos los públicos. No hablamos, por tanto, de rutas familiares, hay pasos con cierta complicación que requieren tener experiencia en este tipo de situaciones o, al menos, estar en relativa buena forma y no tener vértigo.

Ruta 1: Estrechos del río Sus

croquis-Sus — Croquis de la ruta. Fuente: Wikiloc / IGN.

Aparcaremos en el pueblo de Josa. Hemos llegado desde Zaragoza en poco más de una hora por la carretera que pasa por Lécera y Muniesa, un viaje cómodo y corto. Aparcamos en la entrada del pueblo, junto al polideportivo.

Josa. Punto de partida de esta primera ruta.

Cruzamos por las calles del pueblo dejando la iglesia a mano derecha y terminamos saliendo a una pista que avanza junto al río Sus. El río baja con un caudal escaso pero mayor al habitual ya que este río suele estar seco gran parte del año. Son los efectos del paso de la borrasca Gloria hace ya un mes.

Este río Sus es un humilde afluente del río Martín que desemboca en él pasada la presa del embalse de Cueva Foradada y que en su último tramo cambia de nombre de río Sus a río Seco. A pesar de su nombre y su escaso caudal, en los últimos años ha provocado algún que otro susto tras fuertes tormentas.

Si el viaje por carretera hasta Josa ha sido cómodo y corto, el trayecto hasta la entrada del cañón del río Sus no lo va a ser tanto… Nos quedan por delante cinco kilómetros, los dos primeros por camino y los tres siguientes sin un buen sendero, teniendo que avanzar gran parte del tiempo por el cauce del río para evitar la maleza.

Tras caminar un kilómetro veremos un desvío señalizado. A mano izquierda indica a La Hoz de la Vieja por las lomas y a la derecha a La Hoz de la Vieja por el río. Mi recomendación es que sigamos la pista por donde veníamos siempre paralelos al río y no nos desviemos ya a la derecha, pues hay un tramo sin sendero muy incómodo. En el track puede verse como a la ida fui por el «sendero inexistente» y a la vuelta por la pista, una opción mucho más cómoda.

Pequeña presa junto al Molino Alto. Aquí acaba el camino y habrá que buscarse la vida…

A los dos kilómetros el camino termina a la altura de una pequeña presa muy cercana a las ruinas de un molino, conocido como el Molino Alto. A partir de aquí nos tendremos que buscar la vida vadeando el río en muchas ocasiones o incluso caminando por él. Las marcas blancas y amarillas suelen ir por los márgenes del mismo, pero estos están cubiertos de vegetación (juncos, zarzas…) y hay pocos tramos donde realmente haya una senda real.

Cabras montesas. Una especie cada vez más extendida en la zona.

Camino por el cauce del río la mayor parte del tiempo. El agua no está fría y rara vez cubre por encima de la rodilla. Cuando es así, me salgo a uno de los laterales e intento evitar las zonas de aliaga y las zarzas.

Pasamos por varias curvas muy amplias hasta llegar a la entrada del cañón del río Sus. Una vieja paridera en ruinas con varias marcas blancas y amarillas de PR nos servirá de referencia.

Vieja paridera poco antes de entrar al cañón.

Detrás de la paridera, nace una senda poco definida al principio que comienza a subir por una loma. Hay algo de vegetación pero se puede caminar bastante bien. Ganaremos altura de manera rápida y pronto veremos el río Sus a nuestros pies, bastantes metros más abajo…

Tomando altura, antes de entrar al cañón.

Alcanzada la cota 900, el sendero comienza a llanear y se aproxima a un crestón rocoso que supone la verdadera entrada en el cañón. Las formaciones geológicas en este punto son de gran interés, con un plegamiento de grandes dimensiones al otro lado del río.

20200229_112148 — Panorámica, entrando al cañón.

El crestón rocoso que he mencionado antes tiene unas grapas para facilitar el paso. Es un tramo que no tiene ninguna complicación. Tras superarlo, seguiremos caminando por una senda estrecha y algo desdibujada, sin apenas ganar altura.

Primer paso, equipado con varias grapas.

Seguiremos caminando hasta toparnos con el siguiente paso, equipado esta vez con varias sirgas o pasamanos, uno en ascenso y otro en descenso. Son algo verticales pero no tienen complicación con la roca seca. Tendremos un poco de precaución pues las sirgas están algo deterioradas, han perdido la cobertura de goma que las recubre y algunos trozos están muy oxidados.

Tras el paso con sirgas, avanzaremos por terreno muy roto y resbaladizo hacia una curva pronunciada dentro del cañón. Perderemos también algo de altura. En este punto obtendremos las mejores vistas del día.

Cañón del río Sus, en el tramo más encajonado.

Antes de seguir caminando hacia el final del cañón, merece la pena detenerse y tomar unas cuantas fotos. Si echamos la vista atrás, dirección Josa, tendremos una espectacular panorámica del río Sus. A pesar de la aproximación tan pesada, el esfuerzo ha merecido la pena.

Seguiremos andando hasta llegar a otra curva pronunciada. Tras el giro, pronto veremos dos nuevos tramos equipados con sirgas a modo de pasamanos y alguna grapa suelta. Hay un tramo corto que tiene cierta exposición. No es recomendable con roca mojada. El tramo no tiene una dificultad técnica reseñable, el problema es el óxido y deterioro que acumulan las sirgas y que aporta poca confianza a la maniobra.

Al fondo, el tramo con cierta exposición y con la sirga oxidada.

Superado este tramo, avanzaremos por terreno quebrado y rocoso hacia la salida del cañón. Al fondo comienza a aparecer una construcción en ruinas, es el Molino Viejo o Molino Bajo, final del cañón y punto donde decidimos dar la vuelta para retornar a Josa.

A punto de salir del cañón, una mirada atrás.

El sendero PR-TE 102 sigue su camino hacia La Hoz de la Vieja pero su interés disminuye mucho al ser un tramo de pista que atraviesa campos de cultivo. La vuelta por las lomas que suele usarse para volver a Josa tampoco me llamaba mucho la atención al transitar por el paisaje casi estepario de la zona. Por este motivo, decido volver por el mismo lugar haciendo una ruta completamente lineal.

La vuelta la realizo sin sobresaltos, atravesando con cautela los diferentes pasos equipados del cañón hasta llegar a la paridera donde comenzaba el desfiladero. Desde allí, vuelta a Josa por el camino ya conocido.

Poco antes de bajar al lecho del río Sus para volver a Josa.

Por cierto, uno de los atractivos de esta zona son los bancales y terrazas abandonadas que encontraremos en los márgenes del río utilizados hace muchas décadas para el cultivo. Se hace difícil imaginar como debían ser las condiciones de vida de las personas que habitaban estos lugares hace décadas…

Sin sobresaltos llego a Josa, por un lado contento por haber conocido un nuevo y espectacular cañón en esta zona tan apartada de Teruel y por otro lado algo decepcionado con el mal estado de la ruta: ausencia de sendero, maleza, sirgas oxidadas… Está claro que el camino necesita una buena vuelta de tuerca para hacerlo más accesible, agradable y cómodo.

¿Merece la pena entonces hacer esta ruta? El tramo encañonado es muy corto, no llega a un kilómetro, pero el camino equipado es atractivo y las vistas muy buenas. Para evitar la larga aproximación se puede comenzar la ruta en el pueblo de La Hoz de la Vieja, la aproximación es más corta y se hace por pista. Por tanto, sí merece la pena, aunque si tuviera que repetirla lo haría desde este otro pueblo.

Datos técnicos

Distancia: 12,8 km

Desnivel positivo acumulado: 230 m+

Tiempo neto: 2 horas y 15 minutos (a ritmo muy ligero, corriendo en algunos puntos).

Fecha de realización: 29/02/2020

Cartografía: Visor IGN

Track Wikiloc

Ruta 2: Cascada del Cubo

croquis-Cubo — Croquis de la ruta. Fuente: Wikiloc / IGN.

Llego al coche poco antes de las 13:00 horas después de haber hecho la primera ruta (Hoz del río Sus) y pienso en la cercana Cascada del Cubo. Había visto una reseña de ella en el fantástico blog de Buscando Bucardos e imaginaba que estaría seca… pero al ver el río Sus con agua pensé que el cercano río Radón (otro de los afluentes del río Martín) también podría llevar cierto caudal, y así fue.

Cojo el coche y voy unos 4 kilómetros dirección Alcaine. Aparco en un lateral de la carretera junto a un cartel de madera que indica el inicio del camino a la cascada. El primer tramo es una pista algo deteriorada que llega a una vieja construcción y a partir de ahí, una senda bastante marcada nos permite descender de forma cómoda hasta el cauce del río Radón.

Bajada al cauce del río Radón. Antes de entrar en el tramo encañonado.

En apenas unos minutos estamos en el cañón que conforma el río Radón. Un primer paso muy sencillo equipado con unas pequeñas plataformas para apoyar los pies y un pasamanos nos permite entrar en la zona más encajonada.

Cruzaremos el río y al otro lado veremos el segundo paso equipado, más complejo que el primero. La dificultad del mismo radica en que las grapas comienzan justo encima de una poza con cierta profundidad. Han colocado unos troncos para hacer pie y no mojarse, pero estos se hunden al tocarlos. El paso requiere de cierta habilidad y fuerza pues está algo desplomado.

Superado el segundo tramo equipado que nos permite salvar una poza.

Por delante tenemos un tramo muy bonito. El cañón es profundo y el río discurre por la parte central dejando un poco de espacio para caminar con cierta comodidad.

Tramo central, muy bonito y relativamente cómodo.

Poco a poco nos vamos acercando a la cascada, pero antes debemos salvar dos tramos equipados más. El tercer tramo equipado de la ruta es evitable si no hay un gran caudal, yo a la ida me lo salté pero a la vuelta sí que lo tomé. Es un tramo relativamente vertical con sirgas y pasamanos que nos permite salvar un estrechamiento del cañón. No tiene dificultad real.

El cuarto tramo equipado sí que es inevitable a no ser que el río baje completamente seco. Consta de un primer paso con grapas a modo de escalera, un segundo paso con un poco de exposición equipado con unas sirgas y un tercer paso equipado con una cadena y unas plataformas para apoyar los pies. No es complicado, pero andaremos con cautela ya que hay zonas con roca húmeda algo resbaladizas.

Escalera de grapas para acceder a la cascada.

La cadena nos deja al lado de la Cascada del Cubo. El agua ruge con fuerza a pesar de que el caudal no es muy grande. Me sorprende la belleza del lugar, salvaje y desconocido… una auténtica sorpresa.

Tras pasar un buen rato echando fotos y disfrutando del lugar, decido volver al coche por el mismo camino. Sin sorpresas, voy deshaciendo los distintos pasos equipados y subo al trote por la senda que me devuelve a la carretera.

Saliendo a la carretera. El terreno seco contrasta con la cascada que acabamos de visitar.

Muy contento, vuelvo al coche después de esta segunda ruta. Ha sido todo un acierto venir a visitar la cascada. Si la ruta al cañón del río Sus me había decepcionado un poco por su aproximación, esta ruta ha sido todo lo contrario… una verdadera sorpresa.