Ascensión clásica al Moncayo desde la Central Hidroeléctrica de Morca

Los bosques de las faldas del Moncayo son, además de su cumbre y sus circos de origen glaciar, los grandes atractivos de este Parque Natural situado en la provincia de Zaragoza. La ruta más popular, que parte desde el santuario de la Virgen del Moncayo a casi 1.600 metros, no pasa por los bosques mejor conservados del parque y es una pena, más si cabe cuando estamos en otoño.

Circo de San Miguel y cima del Moncayo.

La mejor forma de visitar estos bosques es comenzar la ruta desde mucho más abajo, ya sea desde el parking de Agramonte o desde la Central Hidroeléctrica de Morca. Si queremos disfrutar de los hayedos debemos acudir a Agramonte y si queremos hacerlo de los pinares, es mejor comenzar en Morca. Ambas rutas nos permitirán alcanzar la cumbre más alta del Sistema Ibérico dándonos antes un buen «baño» de bosque.

Croquis detallado. Fuente: Wikiloc / IGN.

Detalles del itinerario

La ruta comienza en la Central Hidroeléctrica de Morca, cerca del pueblo de Añón de Moncayo. Para llegar hasta este lugar, lo mejor es tomar la carretera que parte del Monasterio de Veruela y se interna en el Moncayo, es decir, no es necesario pasar por Añón, pues daremos bastante rodeo y las carreteras no son más que pistas asfaltadas por donde cuesta bastante avanzar.

Junto a la central hay espacio para dejar el coche, unas 15 plazas.

Primer tramo de subida.

El camino que asciende desde Morca (1.000 m) al santuario de la Virgen del Moncayo (1.620 m) no está señalizado con carteles o marcas de pintura, solamente con hitos colocados por los senderistas. El primer tramo de subida es muy bonito: es una senda preciosa, bien hollada, que remonta el barranco de Morca atravesando un bosque mixto muy bien conservado. Principalmente hay pinar, no hayedo, por lo que, a pesar de ser otoño, no notamos grandes cambios en el colorido.

Precioso tramo de subida atravesando un frondoso pinar.

Avanzaremos por terreno cómodo dejando el arroyo a mano derecha, el cual, a pesar de las escasas precipitaciones de este verano y otoño, baja con un caudal respetable. Lo cruzaremos sobre la cota 1300 para seguir ganando metros por el bosque.

Los hayedos destacan con sus colores otoñales.

Sobre la cota 1350, saldremos a una pista forestal. Giraremos a la derecha y la seguiremos por ella un ratito para tomar después un desvío a la izquierda, por un ancho cortafuegos reconvertido en pista.

Pequeño hayedo en la subida al santuario.

El cortafuegos finaliza y alcanzaremos una segunda pista forestal, esta sobre la cota 1480, y haremos lo mismo: seguiremos unos metros por ella hasta dar con un desvío a mano izquierda y tomarlo. Cuidado porque ahora el camino que tomamos es una sendita menos marcada. El desvío está señalizado por un hito de piedras y habrá que estar atento para no pasarlo de largo.

Subida al santuario.

La senda, muy bonita, nos deja en la ermita y fuente de San Gaudioso, muy cerca del santuario de la Virgen del Moncayo. Es un buen punto para coger agua antes de afrontar el ascenso definitivo al Moncayo.

Ermita de San Gaudioso.

Después de pasar por el Santuario, donde existe un bar y también una segunda fuente, tomaremos el camino tradicional a la cima del Moncayo. Está bien señalizado. Dejaremos a mano izquierda el sendero que conduce al collado Bellido y ganaremos metros por un bosque hasta salir a terreno abierto y ver, frente a nosotros, el grandioso Circo de San Miguel, conocido popularmente como «El Cucharón«.

Subida por bosque al Cucharón o Circo de San Miguel.

Llegaremos a la base del circo (1.900 m) pero el camino gira pronto a la izquierda para trazar un zig-zag que permite ganar altura de manera cómoda por el contrafuerte que separa los circos glaciares de San Miguel y de San Gaudioso, este último de menor entidad.

Circo de San Miguel.

El camino zigzaguea por la pedrera. Es ancho y está muy marcado por lo que, si no hay nieve o hielo, no habrá problemas. En la parte final, antes de salir al cordal del Moncayo, veremos un cartel de peligro que nos advierte de dificultades si las condiciones no acompañan.

Vistas a la cima del Moncayo durante la subida.

Esta cima, a pesar de su aspecto bondadoso, es muy traicionera, especialmente en invierno. El tiempo aquí puede ser infernal, con fuertes vientos y niebla frecuente en el cordal cimero. Hay que tener respeto y saber darse la vuelta a tiempo si las condiciones no son buenas…

Caminando por el cordal.

Sin ningún problema, alcanzamos el cordal del Moncayo, ancho y muy alargado. Solamente quedará llegar a la punta más alta por un marcadísimo camino que recorre todo el lomo.

Cima del Moncayo.

Llegamos a la cima del Moncayo, que con sus 2.316 metros de altura es la más alta de todo el Sistema Ibérico. En el punto más alto hay una estatua de la Virgen del Pilar, varias placas y un vértice geodésico. También hay varios vivacs hechas con piedras que suelen utilizarse por los montañeros para resguardarse del fuerte viento.

Bajando por la cara Oeste.

Para bajar, lo haremos por la pedrera de la cara Oeste, por un sendero pedregoso pero bien marcado con hitos. Para tomarlo, seguiremos recto por el evidente cordal hasta asomarnos a esta cara de la montaña. Este camino cada vez es más popular y año tras año mejora, estando ahora perfectamente marcado.

Senda de los cazadores.

Perderemos rápidamente más de 300 metros de desnivel para bajar hasta el collado de Castilla (1.950 m), cruce de caminos importante. Nosotros seguiremos por la derecha, descendiendo por el barranco de Castilla o de Agramonte hasta dar con un gran hito en la cota 1830. Aquí giraremos a la derecha y nos internaremos en un bosque que pronto dará paso a una gran pedrera que baja de la cima y que atravesaremos sin apenas ganar ni perder altura, es la conocida como senda de los cazadores. Es un tramo incómodo, con mucha roca, aunque las vistas de los bosques que hay a nuestros pies compensan con creces el esfuerzo.

Bonitas vistas antes de entrar de nuevo en el bosque.

La pedrera da paso a un bosque de pino. Por él descenderemos de manera cómoda hasta dar con la pista forestal que asciende al santuario a la altura del último de los aparcamientos, el de Haya Seca. Recorreremos por ella los últimos metros para dar de nuevo con el santuario y cerrar así este pequeño bucle circular.

Por el pinar, camino al Santuario.

Ahora, por sendero ya conocido, volveremos a la Central de Morca disfrutando de los bosques y del ambiente otoñal del Moncayo.

Vistas en el descenso al Cabezo de la Mata (1.438 m).

La ruta es muy recomendable, más si cabe en esta estación del año. El tramo hasta el santuario es muy tranquilo y solitario, no así el resto de la ruta, que discurre por los caminos más populares de esta montaña.

Datos técnicos

Distancia: 21 km

Desnivel positivo: 1.420 m+

Tiempo neto: 3 horas (entrenamiento de carrera de montaña)

Fecha de realización: 11/10/2021

Cartografía: Parque Natural del Moncayo. Editorial Prames. Escala: 1:25.000

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2 respuestas a “Moncayo (2.316 m) desde la Central de Morca.”

  1. Avatar de Eduardo Pardo
    Eduardo Pardo

    Hola.

    Una forma diferente de subir al Moncayo. Yo ese tramo final desde el cortafuegos a la ermita de San Gaudioso, lo he realizado un par de veces en invierno con nieve y toca tirar de GPS e intuición, porque no se ve rastro ni de sendero ni de mojones.

    Para el descenso, buscando algo diferente, se puede bajar por la «directa», que acaba enlazando con la senda de los cazadores (así se llama la senda que cogiste y rodea el Moncayo hasta haya seca).

    Un saludo

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    1. Avatar de Península Blog
      Península Blog

      Hola Eduardo,

      Ese tramo sin nieve se sigue bien aunque es el tramo menos marcado de la ruta con diferencia.

      No sabía que llamaban senda de los cazadores al camino que une el Collado de Castilla con el parking de Haya Seca. Me lo apunto para añadirlo a la reseña.

      Muchas gracias!

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