CIRCULAR A LA RAMBLA DE CELUMBRES DESDE PORTELL DE MORELLA
El Maestrazgo es una comarca histórica que se extiende entre Teruel y Castellón. Es una tierra dura, castigada por el viento mestral, con altos páramos y profundos barrancos repletos de vegetación mediterránea. Uno de estos barrancos es la Rambla de Celumbres (Sellumbres en valenciano), que se extiende al Sur de la bella localidad de Morella, separando las poblaciones de Portell de Morella y Castellfort.
La rambla no suele llevar agua, es un río estacional. Nace en Aragón, en Mosqueruela (sierra de Gúdar) y en esta comunidad recibe el nombre de río de las Truchas para más tarde tomar el nombre de rambla de Celumbres al pasar a la comunidad Valenciana. Tributa sus aguas al río Bergantes, afluente a su vez del aragonés Guadalope.

La ruta está balizada como sendero de Pequeño Recorrido PR CV – 408. La mayor parte del itinerario discurre por unas sendas muy bonitas y bien conservadas, entre bancales y muros de piedra en seco, otra de las peculiaridades de esta zona. La rambla es una pasada, en su parte central está enclavada entre paredes de más de 100 metros de altura. Un pequeño tesoro escondido en un rincón recóndito de la provincia de Castellón.

EL RECORRIDO
A las 11 de la mañana comenzamos a caminar por las calles del pueblo de Portell de Morella. Saldremos de él por una pista asfaltada señalizada como GR a Villafranca del Cid. La ruta que seguimos está balizada como PR CV-408, sin embargo, las balizas y las marcas blancas y amarillas de PR comenzaremos a verlas ya casi en la propia rambla.

Tras los dos primeros kilómetros, que discurren por pista, tomamos una senda que rodea un barranco, hasta alcanzar una gran cruz de madera junto al camino, conocida como Cruz de las Artigas. Junto a la cruz hay un cruce de caminos y debemos estar atentos para tomar la senda adecuada (ver track), pues pone una cruz blanca y amarilla de camino equivocado, cuando realmente es la senda que debemos tomar.

La senda baja poco a poco al fondo de la rambla. Es una senda muy bonita que discurre entre pinares, pegada a las rocas. Ya en la rambla, la abandonaremos rápidamente y pasaremos por el pinar contiguo. Subiremos a un pequeño collado para volver a bajar a la rambla, evitando así un amplio meandro del cauce.

Estamos por fin en la rambla de Celumbres. El paisaje es muy bonito. La rambla pedregosa contrasta con los pinares y las paredes de roca.

Llama la atención la cantidad de procesionaria que hay en las copas de los pinos. Menos mal que estamos en enero y las orugas todavía no han bajado al suelo, pues son muy tóxicas para los perros… Habrá que tener cuidado si venimos con nuestra mascota en los meses más propicios para esta plaga.

En este tramo central de la rambla no hay sendero. Hay que andar por el cauce seco. Es bastante cómodo, salvo algún tramo puntual de rocas más grandes. En general, no hay ninguna dificultad.

La Roca del Corb es uno de los platos fuertes de la ruta. Es una pared anaranjada con un espectacular desplome que cae sobre la rambla. Es fácil sentirse pequeño debajo de semejante paredón.

Pasados 500 metros aproximadamente tras la Roca del Corb, salimos de la rambla y tomamos una pista forestal que discurre junto al cauce, a mano derecha. Este tramo de pista tiene un par de kilómetros. Es un tramo muy cómodo y de gran belleza, pues discurre entre grandes paredes muy bonitas. Es un tramo muy agradable y fácil de caminar.

En la última parte, pasamos bajo la Roca Roja, pared vertical que se asoma al cauce justo a la altura de un amplio meandro. Kilómetros más tarde, nos asomaremos a los abismos desde su cima, en un mirador natural de gran belleza.

Abandonaremos la pista principal en un desvío señalizado y tomaremos un camino que sale a mano izquierda y que se interna en el Barranc de la Barcella. Remontaremos este bonito barranco por una preciosa senda que sube de manera decidida entre la densa vegetación que lo cubre todo.

Finalizado el barranco, la pendiente disminuye y saldremos a un camino más amplio que nos dejará en la planicie cimera de la Roca Roja. Debemos desviarnos del sendero balizado (ver track) y andar unos metros fuera de senda para asomarnos al mirador. Merece la pena perder 10 minutos, las vistas a la rambla son impresionantes.

El último tramo hasta Portell de Morella discurre por sendas sin apenas ganar desnivel, siempre entre muros de piedra en seco y bancales. Un paisaje ya menos llamativo pero muy bonito.

Poco antes de anochecer, llegamos a Portell de Morella, tras una agradable y solitaria jornada de montaña en un recóndito lugar de la provincia de Castellón perfecto para desconectar de todo…
DATOS TÉCNICOS
Distancia: 17,5 km
Desnivel positivo acumulado: 775 m+
Tiempo neto: 5 horas
Fecha de realización: 03/01/2018
Cartografía: Visor IGN
ALGUNOS LINKS INTERESANTES
Esta zona del Maestrazgo es perfecta para hacer un poco de turismo rural y visitar algunos de los pueblos más bonitos de la península: Morella, Cantavieja, Puertomingalvo…
Otra zona de gran valor natural y cercana a esta rambla es el Parque Natural de Penyagolosa, una de las montañas más emblemáticas y altas de la Comunidad Valenciana.
Es una zona muy especial y que todavía mantiene el encanto rural que ya han perdido otras zonas de España más explotadas… merece la pena una visita.
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