El hayedo de la Pardina del Señor por el sendero GR-15.
El bosque de la Pardina del Señor se encuentra en el valle del río Chate, un pequeño valle que conecta las localidades de Fanlo y Sarvisé. Estamos en el Sobrarbe, a las puertas del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en una zona de media montaña rodeados de picos de poco más de 2.000 metros y bosques muy bien conservados.
La mejor forma de conocer este bosque, es recorrer el sendero GR-15 que lo atraviesa de extremo a extremo uniendo los pueblos de Fanlo y Buesa. Es un camino balizado bien señalizado y mantenido que hará de esta excursión un cómodo paseo.
La ruta comienza en Fanlo y termina en Buesa, aunque puede alargarse hasta Broto o hasta Sarvisé. No es una ruta circular, serán necesarios dos coches para volver al punto de inicio.
La ruta no tiene pérdida, durante todo momento seguiremos el sendero GR-15 (marcas blancas y rojas) pasando por la abandonada Pardina del Señor que da nombre al bosque. Es una ruta con algunos subibajas pero, en general, muy cómoda.
Detalles del itinerario
Aparcamos en la entrada del pueblo de Fanlo, en un lado de la carretera que accede al casco urbano. No llegaremos a entrar en esta población ya que tomaremos la carretera en dirección a Sarvisé. Caminaremos unos 500 metros carretera abajo hasta toparnos con un cartel indicador del sendero GR-15 que nos manda a mano derecha por una senda.
La senda desciende hasta el lecho del río Chate. Perderemos aquí unos 200 metros de desnivel por un sendero muy bonito y umbrío, bajo la sombra de grandes pinos y masas de boj.
Llegamos al río que, a principios de agosto, baja con poco caudal. No hay puente, por lo que toca vadearlo, algo que no suele suponer un problema. A la derecha, un poco más arriba, hay una diminuta cascada. El entorno del río es muy bonito y salvaje.
Al otro lado, la senda comienza a remontar metros, ladera arriba. Poco a poco nos iremos internando en un majestuoso bosque y las hayas harán acto de presencia. El camino gana en belleza por momentos.
Hasta que alcancemos las famosas ruinas de la Pardina del Señor, tendremos que remontar los 200 metros de desnivel que hemos perdido poco antes. La senda es cómoda aunque no está exenta de dureza. Las rampas fuertes se alternan con tramos llanos.
Llegamos a las ruinas de la Pardina del Señor. También es conocida como Pardina Ballarín, pues está en la ladera sur de la montaña conocida como Pueyo Ballarín (2.027 m). Es una casa de grandes dimensiones, con la cubierta hundida pero con todos los muros en pie. En los alrededores hay algunas construcciones más y una ermita, todas ellas en ruinas.
Llegar hasta aquí partiendo de Fanlo ya supone una excursión muy interesante. Es una opción que nos podemos plantear si no tenemos dos coches y queremos disfrutar del bosque y la visita a la pardina sin invertir casi todo el día.
Tras la visita a la pardina, comienza el tramo más bonito e impresionante. El hayedo aquí se vuelve más frondoso y las hayas de mayor porte, es un tramo espectacular.
Por desgracia, hay bastantes árboles caídos y cruzados en el camino. En algunos puntos toca hacer un poco de contorsionismo para poder pasar aunque, en general, se saltan o se pasan por debajo sin mucho problema.
Este año, 2020, es bastante especial debido a los meses de confinamiento de marzo a mayo por el coronavirus y eso ha podido influir en el escaso mantenimiento que ha tenido este sendero en los últimos meses. Quizá ahora, unos meses después, estos árboles ya hayan sido retirados. Este camino es muy conocido y transitado en otoño y suele estar impecable.
El hayedo va perdiendo entidad y los pinos comienzan a hacer acto de presencia. El bosque irá cambiando poco a poco y también se volverá menos denso. Los claros van apareciendo y, por primera vez, podemos contemplar el paisaje que nos rodea.
Vamos viendo montañas, todas ellas conocidas: Manchoya (2.033 metros), Monte Corona o Suerio (1.954 m), Comiello (1.889 m)… Picos redondeados, de formas suaves, con unas laderas repletas de bosques.
Alcanzaremos una zona de viejas pardinas abandonadas. En algún punto del camino, junto a estas pardinas, las zarzas y la maleza se han comido un poco la senda y el paso se complica. Es un tramo aislado, el resto del sendero está bien desbrozado y se puede pasar sin complicaciones.
Dejaremos atrás estas viejas bordas y alcanzaremos el Barranco del Baño que tiene un espectacular salto de agua. A partir de este barranco, el bosque se vuelve a hacer más frondoso y tendremos por delante unos pocos kilómetros muy agradables sin apenas ganar o perder altura hasta conectar con la pista forestal que baja de Buesa.
En este último tramo, gozaremos de unas grandes vistas hacia los Llanos de Planduviar, una inmensa llanura donde el río Chate desemboca en el río Ara. Uno de los puntos más bonitos del valle de Broto, que siempre presenta un verde primaveral espectacular.
Ya en la pista, tocará remontar unos metros hasta alcanzar el bonito pueblo de Buesa, dividido en dos pequeños barrios. En el barrio más alto se encuentra la iglesia y en el barrio bajo el famoso restaurante el Balcón del Pirineo, donde podemos aprovechar para reponer fuerzas.
Una ruta muy bonita que hicimos en un día fresco de verano. A ser posible, es preferible hacerla en otoño por la belleza del bosque.
Si os ha gustado esta zona del Sobrarbe, os dejamos otras propuestas para hacer muy cerquita de Fanlo:
Datos técnicos
Distancia: 16 km
Desnivel positivo: 600 metros
Tiempo neto: 4 horas y 30 minutos
Fecha de realización: 03/08/2020
Cartografía: Sobrarbe Central. Editorial Alpina. Escala: 1:40.000.
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